Una gran primera parte del Pucela fulmina al líder. Real Valladolid 3-2 Huesca

Foto del partido entre el Real Valladolid y el Huesca en el Nuevo Estadio José Zorrilla.

Foto del partido entre el Real Valladolid y el Huesca en el Nuevo Estadio José Zorrilla. 

El Huesca está intratable. O lo estaba. Llegaba a Zorrilla con una ventaja de 8 puntos sobre el segundo clasificado, el Cádiz, que, por cierto, juega mañana, domingo 18 de febrero de 2018, contra el Numancia, que llega octavo al partido, en Los Pajaritos.

 El Real Valladolid ha conseguido ganar al líder. 3-2. A los 7 minutos de partido, Jaime Mata adelantaba al Real Valladolid. Gran regate por la banda derecha de Antoñito, que entra en el área muy cerca de la línea de fondo. El lateral le pasa a Jaime Mata. Tira, pero rechaza en un jugador del Huesca. El rechace le cae al Pichichi de Segunda, que parece que es capaz de meterla hasta como Maicon. Mata tiene que tirarse para darle al balón y dispara con la zurda. El tiro se cuela en la portería. Muy distinto al de Maicon, pero buen gol. El segundo también es de Mata. Recibe un pase, se mete en el área y tira cruzado. Golazo. El Chimmy Ávila pierde un poco la cabeza. O mucho. Comete una falta, finge que le duele la cabeza y se va a protestar al árbitro. Pero no solo eso. En una jugada posterior le da un poco Calero, se tira, se levanta y agrede al jugador blanquivioleta. Roja. El público no deja de insultarle.

 En la segunda parte, pese a tener un hombre más, el Real Valladolid encaja dos goles. El primero es obra de Luso. Tira desde lejos sin peligro, pero el disparo se envenena cuando toca en Calero. Masip, que había ido al otro lado a por el balón, no puede hacer nada para evitar el gol. 2-1. Pero, después, una mano de Kiko Olivas iba a provocar un penalti. Centro del Huesca sin peligro aparente, ya que detrás de Kiko Olivas hay un jugador blanquivioleta. Pero Olivas golpea la pelota con el brazo. Penalti. Lo transforma Melero con un disparo que engaña a Masip y llega al fondo de la red. 2-2. Pero quedaba tiempo para más. Un pase aéreo exquisito de Mata le iba a dar a Óscar Plano el gol de la victoria. Golazo. Y no solo por la asistencia. La definición de Óscar Plano es buenísima. Recuerda al gol de Iniesta en la final del Mundial de Sudáfrica de 2010, solo que por el otro lado. Y Mata tiene la oportunidad de sentenciar el partido. Recibe un pase solo delante de Remiro, el portero del Huesca. Pero en lugar de tirar (está en la frontal del área pequeña), intenta regatearle. Pero Remiro le quita la bola. Subió dos veces el portero del Huesca. Una en un corner y la otra en una falta, la última jugada del partido. En la última jugada llega un centro al área. Remiro va a hacer una chilena, pero ve que hay un jugador del Huesca detrás, que cabecea, pero el disparo rebota en la espalda de Remiro. Un jugador del Huesca hace una volea con la zurda, pero se va por encima de la portería. En Pucela se pone con 42 puntos, el Huesca se queda con 55.