viernes, 31 de mayo de 2019

La injusticia que sufre Borja en la "Operación Oikos"

Borja Fernández.
Foto tomada de https://www.lapreferente.com/imagenes/jugadores/20172018/56606.jpg?f=20171219.
La "Operación Oikos" es una red de amaños que ha sacudido el fútbol profesional español. Se ha saldado con seis detenidos. Uno de ellos es el recién retirado Borja Fernández.

 Borja Fernández ha tenido la mala suerte de estar en el lugar adecuado en el momento adecuado, pero para mal. El pasado día 16 de mayo, dos días antes del Valladolid - Valencia, partido supuestamente amañado en el que Borja se retiró, este se reunió con Raúl Bravo, el cabecilla de la trama, en el Bar Corinto, que se sitúa en frente de la casa del orensano Borja y del que es propietario. En esa reunión, según Borja, Raúl Bravo le pidió ayuda para ser entrenador de uno de los filiales del Real Valladolid. El club pucelano ha afirmado dicha versión. ¿Por qué no creerse esa versión? Además, el club blanquivioleta ha buscado desde el primer momento quitarse de en medio cualquier responsabilidad. ¿Y cuáles son las pruebas entonces? ¿Que en una frase en una conversación entre Raúl Bravo y Carlos Aranda uno le dijo al otro: "Tranquilo que Borja nos lo arregla"? ¡Venga ya! Puede no haber aceptado. Además, puede incluso ser otro Borja.

Además, me ha llamado la atención cómo detuvieron a Borja: le sacaron esposado de su domicilio. No me parece adecuado. Además, otros supuestos miembros de la trama no han sido esposados.

 Para terminar, me parece lamentable que algo como esto ocurra en el fútbol. No debería amañarse ningún partido y menos en ligas profesionales, en las que los futbolistas ya tienen asegurada la vida.

lunes, 27 de mayo de 2019

Opinión: "El problema de Mikel Landa tiene nombre y apellido: Richard Carapaz"

Mikel Landa.
Foto tomada de https://kirolexpres.com/wp-content/uploads/2018/01/89ED1DD1-1245-4FEF-B303-C1D509925FB9.jpeg.
El Movistar es un gran equipo. Quizá el mejor. Probablemente el mejor. Ahí reside el problema del español Mikel Landa Meana. 

 Ya le frenaron en el Giro de 2015. Corría en el Astana y su jefe de filas era Fabio Aru. Mikel Landa ganó dos etapas seguidas, la decimoquinta y la decimosexta, y se colocó segundo de la general, solo por detrás de Alberto Contador, pero por delante de Aru, que se colocó tercero. En la vigésima etapa, la última importante, se escapó Mikel Landa. Nadie pudo seguirlo y Alberto Contador se quedó del grupo de los favoritos. Landa llegó a aventajarle en un minuto y medio. Conectó con Ilnur Zakarin y se marcharon. Pero llegó la orden del equipo. Debía esperar a Fabio Aru. Contador ganó el Giro.

En este Giro, Mikel llegaba como uno de los favoritos. "Landani" (apodado así por su parecido en la forma de atacar con Pantani) perdió tiempo en la primera semana con las dos contrarrelojes. En la segunda semana, ha ganado tiempo con sus dos ataques, el del jueves con "Supermán" y el del viernes en solitario. Pero ahora tiene un problema. El sábado se escapó su compañero de equipo Richard Carapaz. En el grupo de los favoritos no tiraba nadie y Carapaz se hizo con la maglia rosa. El domingo, Carapaz se fue con Nibali y Landa se quedó haciendo de freno. En la tercera semana, es posible que Landa no ataque, que se limite a defender la maglia de Carapaz. E incluso que, si se queda Carapaz, Landa le tenga que esperar. Es lo que pasa cuando estás en un equipo tan bueno. Puedes ser líder y luego cambiar a gregario. También pasó en el mismo equipo en La Vuelta del año pasado, cuando Nairo Quintana tuvo que esperar a Alejandro Valverde.